Tu corazón se dispara, un mísero cruce de miradas basta para que tu cuerpo se active y luche por mantenerse erguido, mientras la banda sonora de tu vida pasa de un David Guetta a un pop español en el que el cantante parece no haber sido correspondido en su vida.
Y otra relación más, otra vida unida a ti, otra persona dependiendo de tus palabras, de tus actos, de tus emociones…
Ya veremos quién escapa de la quema.
Era un día para desconectar, para olvidarme del mundo durante unas 24h y despertarme habiendo dejado atrás un día más de mi vida sin ninguna anécdota interesante que contar. Por supuesto, no fue así, es lo malo de depender de alguien, que te puede llamar en cualquier momento porque necesita de ti.
Fuimos a la cafetería de Tirso a la que siempre íbamos, las miradas furtivas nos las ahorrábamos, ya nos habíamos cazado. No había nada más que una conexión increíble, un cuerpo bonito, una mente maravillosa y unos ojos verdes respondiendo a todas mis dudas, no había más que ella y es muy posible que cualquiera se conformase con eso si hubiese llegado a conocerla como hice yo.
Sus ojos me invitaban al baño, a la aventura, a volver a morderle el cuello en un lugar que aún no habíamos profanado, quería riesgo, quería aventura, quería devorarme con el morbo como música de fondo.
Me estaba enamorando de esa chica.
Bajé una mano y le empecé a frotar el coño a través del vaquero, ella se empezó a retorcer en ese minúsculo espacio en el que nos encontrábamos. Se dio la vuelta y se puso contra la pared, yo le abracé por detrás y volví a poner mi mano en su entrepierna, ella aprovechaba para frotar su culo en mi polla, poniéndomela cada vez más dura y disfrutando al ver que estaba logrando lo que quería.
Le desabroché el pantalón lo justo para poder meter la mano por dentro y así hice. Tenía el coño completamente mojado, y mi mano rozando sus labios y penetrando en ella solo hacía que se volviese más loca y hacer que su temperatura subiese más y más.
Le di la vuelta y le subí la camiseta lo justo para poder jugar con sus tetas, empecé por agarrar una y lamerle el pezón, mordisqueárselo… Mientras mis manos estaban agarrando sus preciosas tetas mis dientes se lanzaron a sus labios, empecé a mordisquearlos y a besarle.
Ella se agachó y me desabrochó el pantalón, quitándome el cinturón con ese sonido tan característico que a algunas os vuelve locas. Ignorando mis boxers por completo me los bajo de un tirón, me la agarró y me la empezó a masturbar mientras me besaba alrededor de ella, mientras me lamía las piernas…
Se la metió en la boca y la apretó entre sus labios y me la empezó a comer, su lengua jugaba con mi punta dentro de ella y me fijé como ella empezaba a masturbarse mientras me la chupaba, esa imagen junto con cómo me la chupaba me estaba volviendo loco.
Se la empecé a meter despacito, muy, muy despacito, hasta que a la mitad… se la metí de golpe, logrando que ella no se pudiese contener y soltase un grito. Empecé a penetrarle muy fuerte, sin parar, golpeando su cuerpo y aplastándole completamente contra la pared, por lo que pudo ver entre sus piernas y en sus gestos, ella acabó rápido.
– Te quiero, me dijo entre espasmos.
Esas dos palabras me mataron, estaba a punto de correrme pero mi orgasmo se paró en seco, seguí penetrándole sin parar, acariciando su clítoris mientras le golpeaba, bajando un poco el ritmo… nada.
Se dio la vuelta y empecé a frotar mi polla en su coño calado mientras nos comíamos la boca, me la agarré y se la metí, ella se alzó y se abrazó con sus piernas a mis caderas. Seguí penetrándole, haciendo fuerza contra la pared, concentrándome en lo cachondo que estaba, en las ganas que tenía de correrme, nada.
– No puedo, le dije sin parar de penetrarle.
Se bajó de mí y me la empezó a chupar, nada.
Le agarré la cabeza con ambas manos y me empecé a follar su boca, nada.
Se puso contra la pared de nuevo, poniendo el culo en pompa, yo empecé a rozar mi polla entre sus nalgas, moví su tanga, le metí la punta, le agarré las caderas y volví a penetrarle.
Intentaba que cada penetración fuese distinta, primero a un lado, luego a otro, nada.
Por cómo tenía las piernas y cómo se retorcía, ella no tenía ese problema, y lo peor es que se estaba empezando a impacientar.
– Avísame cuando te vayas a correr, me dijo mientras se volvía a meter mi polla en la boca.
Empezó a recorrerla con su lengua, mirándome con sus enormes ojos verdes, rozándola por sus carnosos labios, masturbándomela a toda velocidad con su mano mientras me comía los huevos.
Acabo de llegar de rebote al blog y, con tu permiso, me quedo a seguirlo. Un buen descubrimiento
🙂
Te sigo desde hace tiempo en twitter pero nunca había leído tu blog, porque siempre me pillaba con el móvil y es muy incomodo para leer, y ahora me arrepiento porque la verdad es que es de esos blog que lees y no te dejan indiferentes y te hacen ir de una entrada a otra.
Así que te sigo también por aquí!
ke música menos profunda para un enamoramiento jaja
Me he enamorado oficialmente de tu blog. Pero sin ataduras, solo sexo, claro.
Gracias por la parte que me toca =)
Gracias =)
Mientras el resto sea profundo, no importa.
Me alegro de que te guste, gracias =)
Si leyendo el relato le pones el físico de la chica de la foto no hay persona capaz de no volverse loco, buen trabajo, sexy, apasionado y muy real.
pd: dime que es tan guapa como imagino y caere enamorado
Pero de piel más clara y pelo castaño.
Me encantan estos relatos bff!! me ponen llegue aqui por ascodevida.com entonces decidi entrar empeze a leer i no puedo parar me encantan, te doy la enorabuena por estos fantasticos relatos. 🙂